Lafken Winkul Mapu

 Lafken Winkul Mapu

10.10.2022

Ante la preocupación por parte de nuestros compatriotas que viven arriba del Río Colorado queremos transmitirles un poco de tranquilidad y decir que no hay en Puel Mapu grupos “terroristas”. Vivimos en una tierra -eso sí- signada por una rebeldía hermosa que es muy activa a la hora de pelear por sus derechos. Pero no hay “terroristas”, de ninguna manera coincidimos con esa idea que intenta descalificar y discriminar las luchas y los procesos de recuperación territorial. No hemos visto por aquí gente encapuchada, no hemos visto flamear banderas de la ETA; no hay en la región células activas de Al Qaeda ni de ISIS. Hoy estamos viviendo casi de la misma manera que el resto de los argentinos: mal y agobiados. Ojo: que no haya terroristas no implica que no haya violencia. Se nos ha querido -varias veces- imponer esa vocación silenciadora que tiene el terror, pero por parte del Estado y sus fuerzas represivas. Solemos no tener más remedio que apretar los dientes ante la injusticia y murmurar nuestras puteadas entre dientes.

Les contamos, si quieren saber qué cosa es el terror. Terror es ver como miles y miles de simpatizantes de Gimnasia de la Plata son gaseados y tiroteados con balas de goma ocasionando la muerte de un hincha y cientos de heridos producto de la balacera. Terror fue lo que generó el operativo en que las “fuerzas de seguridad” también en Lof Lafken Winkul Mapu, en Noviembre del año 2017, asesinó a Rafael Nahuel de apenas 22 años, quien se encontraba realizando un proceso de recuperación territorial, asesinato que aún permanece impune. El terror que se impone con violencia y se legitima desde el Estado, que siempre busca garantizar los intereses de una élite; en villa Mascardi, las tierras ancentrales son codiciadas por los negocios inmobiliarios que necesitan esos territorios sin “gente de la tierra”, sin sus historias, sin su memoria, comunidades obligadas a dejar su territorio que les pertenece y en donde ancestralmente desplegaron su existencia y construyeron su cosmovisión.

Vale la pena aclarar que no existe una República Separatista Mapuche, porque el concepto República es europeo y moderno, no Mapuche. Y no se puede ser separatista de nada cuanto siempre te corrieron a los tiros de tu ruka, del lof, del territorio. Lo que sí hay es un pueblo preexistente al Estado y la Nación argentina que lucha por el derecho a ejercer su cultura ancestral, por adorar a sus divinidades ancestrales y su cultura tan rica y vasta como cualquier otra. No hay como dice Patricia Bullrich entre tantas barbaridades que dice“un grupo que quiere ser una república en medio del territorio argentino”. No hay, como dice Berni, “un acto de entrega y concesión de nuestra soberanía”. Hay un país cuya oligarquía ha afincado sus garras en medio del territorio Mapuche, o Tehuelche, o Qom, o Selkman, o Guaraní. Quédese tranquilo, quédese tranquila. O -ante la amenaza del “malón”- no se angustie mirando los canales que desinforman y distorsionan la realidad, discriminando con mensajes racistas las acciones que realizan en este caso integrantes de la comunidad Lafken Winkul Mapu

Les contamos, si quieren saber qué cosa es el terror. Terror es cuando el Estado moviliza 250 efectivos de cuatro fuerzas federales y secuestran, detienen a mujeres y sus niñes a la cárcel local y luego trasladada forzosamente a la cárcel de Ezeiza, vulnerando derechos como pueblo originario, derechos humanos y la posibilidad de tener un proceso judicial justo. Terror es ese ensañamiento contra lamgen y niñeses, tal como ocurrió durante la conquista del desierto hace 140 años. Les contamos además que, el papel de las mujeres en la defensa del territorio es fundamental, no solo en la recuperación sino también en el resguardo territorial, algo que resulta incomprensible para la mirada colonial y extractivista. Les contamos que lo ocurrido en villa Mascardi es un ataque contra los espacios ceremoniales y la concepción espiritual del pueblo mapuche. Les contamos que aquí en Puel Mapu no hay terrorismo, ni terroristas mapuches ni secesionismo ni nada por el estilo. Existe un relato de un enemigo interno (en este caso el pueblo mapuche-tehuelche) que cada vez se agranda más. Y un discurso de odio racial que impulsan razias, represión y despojo; mujeres mapuches presas por estos días y tres asesinatos recientes que aún permanecen impunes; Santiago, Rafa y Elías.

Les contamos, que toda etnia o pueblo preexistente tiene derecho por historia a resistir y rebelarse, a reclamar y exigir que se cumplan y se garanticen sus derechos que son derechos constitucionales, entre ellos el acceso a la tierra comunitaria y que el Estado además garantice reparaciones. Y levantar bien alto como sociedad democrática las banderas del ¡Nunca Más!

¡Nunca Más! Racismo, Xenofobia ni maltrato para con los pueblos originarios. ¡Nunca Más! Un Estado que aterroriza al pueblo mapuche. ¡Nunca Más! Militarizar los territorios recuperados y en resguardo. ¡Nunca Más! de una buena vez

Seba Alegre/Hugo Alvarez